Las leyendas de Cracovia
En el sur del territorio polaco se levanta Cracovia, antigua capital del país y poseedora de un casco medieval colmado de encantos, pero que fue también la puerta al infierno de Auschwitz y Birkenau, donde fueron enviados miles de judíos de toda Europa. por Diego Horacio Carnio - @labitacoraylabujula Poco más de dos horas tardó el bus en recorrer los 288 kilómetros que separan a Varsovia de Cracovia, en un trayecto que se escurre plácidamente a través de las ventanillas, entre campiñas nevadas y pequeños poblados desperdigados en el paisaje. Mientras el bus avanza, me cuesta creer que la belleza que hoy se esparce ante mis ojos, exista en lo que fuera uno los escenarios más trágicos y violentos de la Segunda Guerra Mundial. No podía sacarme de la cabeza el hecho de que Cracovia, nuestro destino en esta parte del viaje, había sido no sólo la puerta de entrada al infierno de Auschwitz - Birkenau , sino también una tierra donde reinaron las atrocidades nazis, sus guetos y persecuciones